Las ocho grandes reformas pensando en el empleo y que blindan las prestaciones sociales

15 Marzo 2012

El presidente del PP visita en Viator (Almería) una fábrica de pan donde asegura que la "clave del futuro" de Andalucía está en los pymes y autónomos

Dice que "el inmovilismo es suicida para el futuro de nuestra tierra", y lo contrapone al "reformismo del sur" que llegará con el gobierno del cambio

Anuncia que el ministro de Agricultura "está batallando" por los agricultores almerienses y recuerda que el Acuerdo con Marruecos lo negoció y votó Zapatero"

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Javier Arenas ha manifestado de nuevo que el debate de esta campaña no es un debate ideológico, sino de "inmovilismo frente al reformismo del sur". Así, el gobierno del cambio, liderado por Arenas, planteará ocho grandes reformas para el futuro de Andalucía, pensando en el empleo como garantía de las prestaciones sociales. "El inmovilismo es suicida para el futuro de nuestra tierra", reiteró el presidente del PP andaluz.

Arenas enumeró esas reformas comenzando por la de la Educación para conseguir una educación pública de calidad, apartado en el que destacó la Formación Profesional. En segundo lugar la Ordenación del Territorio. "Quiero comprometerme a una reforma profunda que supondrá la derogación del POTA. Creo que se puede ordenar territorialmente Andalucía de forma distinta, con el consenso de todos, y haciendo compatible la creación de empleo con nuestra calidad medioambiental", dijo.

La tercera de las reformas a la que hizo referencia el presidente del PP es la reforma fiscal, punto en el que recordó que "Andalucía es la comunidad autónoma donde más impuestos se pagan de España y mientras eso sea así ahuyentaremos los inversores". Así, se comprometió a suprimir en cuatro años el Impuesto de Sucesiones y Donaciones.

Una reforma de la Justicia que acabe con el colapso de los 624.000 asuntos pendientes en los Tribunales, "sinónimo de inseguridad jurídica", es la quinta de las reformas, a la que sigue la de la Administración Pública. Así, apostó por el desarrollo de la segunda descentralización local, explicando que "no sólo se trata de profesionalizar la administración y reducir la administración periférica sino de estudiar qué competencias se pueden trasladar de la Junta a Ayuntamientos y Diputaciones". Esta reforma lleva aparejada la Reforma del Sector Público andaluz, que supondrá la derogación de los 'decretazos' y un plan de reestructuración manteniendo siempre las potestades públicas con los funcionarios, que no serán trasladables al sector público ni a la administración paralela.

En el marco de una reforma presupuestaria y del gasto público, que es la sexta de las reformas anunciadas por Javier Arenas, el gobierno del cambio aprobará una Ley de Techo de Gastos y una Ley de Hacienda Pública para que "no se gaste más de lo que se ingresa" ni se "se gaste ni un euro sin la firma de un funcionario". Además, dijo que pondrá en marcha una Comisión de Contrataciones "para ser informada de todos los contratos de la administración".

El objetivo de la reforma sanitaria, otra de las detalladas por el líder del PP es la despolitización de la sanidad, "dando la confianza a los sanitarios, que son los mejores de España pero también los peor pagados". Arenas añadió que su gobierno se volcará en la "fortaleza de la atención primaria en Andalucía" para que "haya una sanidad más humana y podamos emprender el camino contrario al colapso de nuestros hospitales y nuestras urgencias".

La octava y última de las reformas es la de las políticas de empleo. "Es un escándalo que los parados que no tienen derecho observen cómo bajo el rotulo de las políticos de empleo se despilfarra el dinero público". Arenas apuesta por una hacer una auditoría de las políticas de empleo, una gestión profesional, "no son amiguismos ni discrecional" de las políticas de empleo; y estudiar que la inversión en políticas de empleo vaya vinculada a la capacidad de incorporación al mercado de trabajo.

Javier Arenas manifestó que el debate de esta campaña "está en la gestión: quién nos arruina la economía y el empleo o quién nos puede salvar la economía y sacarnos de la ruina". Dijo que "algunos están intentando contraponer el concepto de la austeridad al de los derechos básicos de los ciudadanos, y es exactamente lo contrario. La mayor garantía de los derechos básicos de los ciudadanos y las buenas prestaciones sociales viene dada por la buena gestión y la austeridad, por eso vamos a ofrecer el reformismo del sur", subrayó.

LA CLAVE DEL FUTURO ANDALUZ PASA POR LA COMPETITIVIDAD DE PYMES Y AUTÓNOMOS
Arenas hizo estas declaraciones en las instalaciones de una Fábrica de Pan en Viator (Almería), donde dijo que la "clave" para el futuro de Andalucía "es tener empresas competitivas". Así, dijo que los pequeños y medianos empresarios son la "gran clase media" de Andalucía y resaltó su vinculación con el sector servicios, el turismo o la alimentación.

Arenas dejó claro que si hay cambio en Andalucía, la comunidad "será un factor de cohesión para España", y que él, como presidente autonómico, no va a practicar "ningún egoísmo territorial, pero que será " muy beligerante" si algún andaluz no tiene las mismas oportunidades que otros. Además, añadió que "Andalucía no va a dedicar ni un euro a competir con el estado, ni un euro a que haya política exterior andaluza, y todo lo que podamos ahorrar en esas y otras políticas que no puedan hacerse se hará pensando en la educación".

ACUERDO AGRÍCOLA CON MARRUECOS
Aprovechando su visita a la provincia de Almería, Arenas quiso recordar que el convenio con Marruecos "lo negoció zapatero, lo votó a favor, le dio el visto bueno en la Unión Europea, y el grupo socialista lo apoyó en el Parlamento europeo, y eso es parte de la herencia terrible que hemos recibido".

Aseguró que el ministro de Agricultura "está batallando", buscando consenso con otros países europeos con dos objetivos: la modificación del reglamento de frutas y hortalizas con la intención de que podamos competir lealmente, por un lado, y los controles de aduanas y fronterizos, por otro, concluyó.